El mudi es uno de los perros pastores húngaros de talla media.
Aunque es uno de los perros más inteligentes que existen,
también es uno de los menos conocidos.

Apariencia del mudi

Este perro de talla media tiene un cuerpo tan largo como alto, por lo que su perfil se inscribe en un cuadrado.
El cuerpo es musculoso y atlético, pero no voluminoso.
El movimiento es característico de la raza, ya que el mudi camina en pasitos cortos.
La cabeza tiene forma de cuña y se estrecha hacia la nariz.
De acuerdo con el estándar de la raza, la cabeza del mudi debe dar impresión de un perro alerta,
enérgico, alegre e inteligente, sin indicios de miedo o agresividad.

En perros de color negro, blanco, bayo o azul mirlo, la nariz es negra.
En perros de otros colores, la nariz debe ser del mismo color que el manto.
Los ojos están dispuestos oblicuamente, lo que les da una mirada un tanto desafiante.
Son de color oscuro, pero en los ejemplares de color azul mirlo se aceptan ojos azules o blancos.
Las orejas son erectas, de inserción alta y con forma de "V" invertida.

La cola de este perro es de inserción media.
En reposo, el perro la lleva colgando, pero con el tercio distal recogido.
Durante la acción, el perro la enrolla en forma de hoz por encima de la línea superior.
Lastimosamente, según el estándar, la cola amputada no es deseable pero sí aceptable.

El pelaje de este perro tiene características diferentes en diferentes zonas del cuerpo.
En la cabeza y la cara anterior de las patas es corto, recto y liso.
En el resto del cuerpo es largo, de tres a siete centímetros de longitud, notoriamente ondulado o con suaves rizos, tupido y brillante.
Puede ser de color bayo, negro, azul mirlo, ceniciento, marrón o blanco.

Temperamento y carácter del mudi

Estos perros tienen un temperamento estable que les permite ser excelentes mascotas
y buenos perros guardianes al mismo tiempo. Son vivaces, valientes, alertas y muy inteligentes.
Tienen una gran capacidad de aprendizaje y son fáciles de entrenar.
Sin embargo, forman un vínculo muy fuerte con una sola persona y por eso se dice que son "perros de un solo dueño".

Los mudi suelen ser reservados con los extraños y toman su tiempo antes de hacer nuevos amigos.
Sin embargo, no suelen ser perros agresivos y simplemente son cautelosos.
Tienden a llevarse bien con otros perros.
La temprana socialización de los perros es importante para evitar que de adultos se conviertan en animales huraños, tímidos o agresivos.

Aunque la raza no es muy popular, es reconocida por su gran capacidad de aprender.
Los mudi destacan en el adiestramiento canino, pudiendo ser entrenados para múltiples funciones.
Estos perros realizan funciones de pastoreo, como perros boyeros, perros antinarcóticos, perros de guardia, etc.
Es importante tomar en cuenta que la mejor manera de entrenarlos es a través de métodos positivos,
tales como el adiestramiento con clicker.

Por su temperamento estable y gran adaptabilidad, estos perros no suelen presentar problemas de comportamiento.
Sin embargo, pueden ser perros ladradores.
Estos perros pueden ser excelentes mascotas cuando han sido correctamente socializados y se les brinda el adiestramiento y el ejercicio que necesitan.

Peso y altura

Los machos alcanzan una altura a la cruz de entre 41 y 47 centímetros.
La altura a la cruz de las hembras ronda entre 38 y 44 centímetros.
El peso ideal de los machos está entre 11 y 13 kilogramos. El de las hembras está entre 8 y 11 kilogramos.

Salud y cuidados

Al ser una raza poco conocida, no se sabe mucho acerca de las enfermedades caninas más frecuentes en el mudi.
Sin embargo, parece que es una raza muy saludable y no tiene mayor incidencia de estas enfermedades que otras razas de perros.
Sin embargo, los chequeos regulares son importantes y no está de más prestar atención la displasia de cadera,
tan común en el grupo de perros pastores.

El cuidado del pelo es sencillo y suele ser suficiente con el cepillado semanal,
y el baño sólo cuando el perro está sucio. Hay que tomar en cuenta, sin embargo,
que el mudi pierde pelo regularmente durante todo el año.

Por otra parte, este perro necesita mucho ejercicio.
Dos o tres largos paseos diarios son necesarios para ayudar a quemar las energías del mudi.
Los juegos y la práctica de deportes para perros también ayudan mucho.
En el último caso, los deportes más adecuados para esta raza son el herding (pastoreo), agility, flyball y freestyle canino.

Aunque éste no es un perro que se desviva por atención y compañía (como el golden retriever),
sí necesita pasar gran parte del día con su familia.
En particular prefiere la compañía de la persona con quien ha formado un vínculo especial.

Aunque tiene un carácter casi ideal, este perro no es apto para vivir en departamento.
Puede llegar a acostumbrarse, pero necesita muchos paseos diarios.
Es mejor si vive en una casa con jardín grande donde pueda correr libremente.
Eso no elimina la necesidad de paseos, pero reduce la cantidad necesaria.
Por supuesto, lo mejor es que el perro use el jardín sólo para ejercitarse y distraerse, pero que habite dentro de la casa, junto a su familia.

Historia del mudi

Esta raza es antigua y no se conoce mucho sobre sus orígenes.
Sí se sabe que no es una creación deliberada del ser humano, sino una raza creada espontáneamente por selección natural.
Originario de Hungría, el mudi es un perro pastor y boyero natural.

Al parecer, esta raza tiene relación filogenética con el puli y el pumi, y también tiene ancestros entre los perros de Alemania,
que también serían ancestros del perro pastor alemán.
Hasta 1930 se clasificaba a todos los perros pastores húngaros de talla media en una sola categoría.
En ese año, sin embargo, se separó al mudi del puli y el pumi.
Hoy en día esta raza es prácticamente desconocida, incluso en su país natal.
Aquello es una pena, ya que el mudi es un perro con grandes cualidades que le permiten adaptarse muy bien a la vida moderna.