Sorraia

origen: Portugal
nombre científico: Equus caballus
familia: Equidae
altura: 124 para 134 cm
peso: 0 para 300 Kg

Historia

Su origen es ancestral y se cree que el Sorraia se puede observar en pinturas rupestres.
En realidad, es conocido por haber sido utilizado por los romanos.
El Sorraia es un caballo de origen portuguesa, considerado antepasado de razas ibéricas como el Andaluz y el Lusitano.

Su complexión básica se parece bastante a la del Tarpan,
el caballo indo-europeo extinto en el siglo XIX.
Los Berberes del Norte de África son probablemente los responsables por el aumento
del tamaño de este caballo, aunque mantenga todavía una baja estatura.

Ha sido Ruy D’Andrade quienes ha “descubierto” esta raza, cerca del año 1920,
cuando encontró una manada salvaje en vale del río Sorraia, un afluyente del Tajo,
que originó el nombre de la raza. Después de la descubierta, la familia D’Andrade se dedica a la conservación
y desarrollo de estos caballos. No obstante, la raridad de la raza se mantiene y sólo
ahora se empieza a exportar algunos ejemplares, sobretodo para la Alemania.
Hay solamente poco más que cien caballos Sorraia en todo el mundo, 90% en territorio portugués.

Descripción

Es un caballo robusto pero de estatura baja, el Sorraia.
Se considera que el factor determinante de su baja estatura es el suelo poco fértil del vale del Sorraia.

Temperamento

Bravo e independiente, el Sorraia posee un temperamento muy característico.
Logran ser buenos caballos de silla, pero hay que saber lidiar con su fuerte carácter.

Utilización

El Sorraia ha sido utilizado por campesinos locales para trabajos ligeros en la agricultura.
Pero además del “sello” de caballo de trabajo, el Sorraia se manifiesta apto también para demás actividades hípicas.

Pelaje

Su principal tonalidad es el gris, aunque se pueda encontrar también ejemplares bayos.
Otra característica del Sorraia es una fina raya al largo del dorso más oscura.
Por veces se puede observar estas rayas también en las patas y más raramente en el cuerpo, a que llamamos de “cebruras”.